San Diego - El personal de un centro médico en San Diego, California, no pierde la esperanza de algún día conocer la identidad de uno de sus pacientes, un hombre en estado vegetal que se cree puede ser un indocumentado que cruzó la frontera hace ya 16 años.
El hombre, a quien llaman "Sixty-Six Garage" en alusión al lugar donde fue encontrado en 1999, sufrió un accidente automovilístico tras ser perseguido por la Patrulla Fronteriza a unas millas de la frontera con México en El Centro, California.
A raíz del choque, el hombre, que no llevaba consigo ninguna identificación, sufrió un daño cerebral severo que lo dejó sin poder hablar y con movimientos muy limitados.
Tras ser atendido en un hospital de San Diego, el hombre, a quien se desconoce su nombre o nacionalidad, fue llevado en marzo de 2000 al Centro de Enfermería Villa Coronado, que se convirtió en su casa desde entonces.
Tumbado en una cama en este centro especializado en cuidado a largo plazo, "Sixty-Six Garage" es mantenido con vida a través de un respirador y un tubo de alimentación.
El hombre está consciente y aunque no puede interactuar con su entorno, en ocasiones sigue el movimiento de enfermeras y otros visitantes con sus ojos.
Por más de una década, esta ha sido la vida de este hombre que aparenta tener entre los treinta y cuarenta años y por sus rasgos físicos se piensa es de ascendencia hispana.
El nombre, "Sixty-Six Garage" le fue impuesto, debido a la dirección del lugar en donde se registró el accidente que era cerca de un garaje que lleva el número 66.
Años atrás, se intentó cambiar ese nombre legalmente no obstante optaron por mantenerlo para que no perdiera sus beneficios dados a través del programa Medi-Cal, donde se encuentra registrado con el nombre "Sixty-Six Garage" y bajo el cual se han solventado sus gastos médicos.
Ahora, las autoridades de dicho centro de salud, que mantienen intacta su fe, esperan que con contar esta historia finalmente se pueda encontrar a la familia de su paciente y algún día llamarlo por su verdadero nombre.
"Es un ser humano, él merece ser identificado y encontrar a su familia", dijo a Efe el director de Villa Coronado, Ed Kirkpatrick.
La búsqueda ha sido difícil y desde que la historia fue dada a conocer a finales del año pasado por el portal inewsource.org, más de veinte personas de países como México, Honduras o Guatemala han contactado al hospital pensando que "Sixty-Six Garage" es el familiar que perdieron cuando salió de casa en su intento por llegar a Estados Unidos.
No obstante, la desilusión llega tras comparar fotografías o señas particulares y comprobar que el hombre en San Diego no es la persona que buscan.
En una ocasión, una mujer mexicana de Texas hizo la petición al consulado de su país para que le ayudaran a realizar las pruebas de ADN que le permitieran saber si el hombre de San Diego es su hermano perdido. Desafortunadamente los exámenes resultaron negativos.
La oficina de prensa del consulado de México en San Diego confirmó a Efe que esa ha sido la única ocasión en que un connacional se ha acercado a la dependencia para solicitar apoyo en torno a la identificación de este hombre.
Posterior a ello, el centro de cuidado médico había recibido la visita de una mujer que hizo el viaje desde Guatemala, aunque al llegar al lugar se percató que "Sixty-Six Garage" no era su hermano perdido.
"Es devastador, porque uno puede sentir esa esperanza", comentó Kirkpatrick, al referirse a todas aquellas personas que lo han contactado al leer la historia a través de internet.
La organización Colibrí Center de Derechos Humanos, que ayuda a familias a encontrar a sus seres queridos e identificar a inmigrantes que han fallecido, tiene registro de dos mil personas desaparecidas que fueron vistas por última vez cuando intentaron cruzar la frontera.
"La causa de este alto número de desaparecidos y personas no identificadas está relacionada con la naturaleza descentralizada de los datos forenses a lo largo de la frontera", señala la agrupación en su portal de internet, donde hace énfasis en que aún no existe un procedimiento para investigar la muerte de inmigrantes no identificados.
Cada año, la Patrulla Fronteriza reporta el hallazgo de cientos de personas fallecidas en la frontera y según información de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza, en 2014 se registraron 307 casos.
Pedro Ríos, director del Comité de Amigos Americanos en San Diego explicó que es común que personas crucen la frontera sin ninguna identificación, ya que es una estrategia en caso de ser detenidos por autoridades de la Patrulla Fronteriza
"Vemos que una tercera parte de los inmigrantes que mueren en los desiertos y en las montañas quedan como personas no identificadas, lo que significa que hay muchos familiares que están buscando a estas personas", lamentó.
La próxima acción que las autoridades del centro médico tomará, será llevar la fotografía e información de "Sixty-Six Garage" para que ésta sea incluida en el Registro Nacional de Personas Desaparecidas y pueda estar al alcance de más personas en diferentes partes del mundo.
"Tenemos al hijo de alguien, al hermano de alguien, hay alguien allá afuera que se pregunta qué fue lo que pasó con su ser querido", subrayó Kirkpatrick.
No hay comentarios:
Publicar un comentario